San Servando y San Germán

Su fiesta se celebra el 23 de octubre. Actualmente son patronos de las ciudades de Mérida y de Cádiz, así como copatronos de San Fernando (Cádiz).

Durante este año 2013, se ha llevado a cabo la ejecución de las obras de restauración de las imágenes de los santos mártires que ocupan destacados sitios públicos; a la entrada de la ciudad, en las Puertas de Tierra, en el edificio del Ayuntamiento y, finalmente, los que presiden la portada principal de la Catedral.

En la Plaza de la Constitución, delante de las Puertas de Tierra
 

Estas dos imágenes de mármol se colocaron en 1705 en el muelle cerca de la Puerta del Mar, y por motivos políticos la derrumbaron en 1873, pero en 1887 y por petición popular se volvieron a colocar en el mismo sitio pero equivocadamente, es decir, San Servando a la derecha y San  Germán a la izquierda mirándolas de frente.  Pero el derribo de las murallas y el crecimiento de la ciudad hicieron que se desmontaran estas imágenes y se ubicaran en los años 50 donde las vemos ahora. Y se colocaron igual de mal que estaban, y por tanto, se dice que están peleados.  (Texto Luis Rivas)

Ermita del Cerro de los Mártires es una pequeña capilla situada en San Fernando (Cádiz)

Tras el ataque de los ingleses a Cádiz a finales del s. XVI y las directrices emanadas del Concilio de Trento sobre el culto a los santos, se gestó en la ciudad un proceso de potenciación del culto y propaganda de exaltación de los dos santos hermanos protectores. Ambos santos eran naturales de Mérida e hijos del centurión Marcelo y de Nonia. Fueron martirizados en el cerro de los Mártires o collado Ursoniano, cerca de Cádiz (San Fernando).

 

 

En la fachada del Ayuntamiento... 

 

Pero fue en las primeras décadas del s. XVII cuando se generalizó su culto gracias a Agustín de Orozco, el verdadero promotor de la causa, que en 1617 convenció al regidor para que propusiera su elección como patronos de la ciudad, y dos años más tarde escribió la hagiografía de ambos e instó al cabildo civil a que se colocaran sus esculturas a los lados de la torre de la casa consistorial.

En la fachada de la Santa Iglesia Catedral...

 

Desde entonces distintas imágenes de los santos hermanos fueron poblando retablos y capillas de la ciudad y su diócesis Se encargaron esculturas en madera dorada y policromada para el culto en las iglesias, y en piedra para presidir fachadas (catedral y ayuntamiento) y triunfos. Algunas esculturas en madera fueron realizadas por los escultores Francisco de Villegas y Alonso Martínez para el ayuntamiento y para el retablo mayor de la catedral. Las de piedra eran importaban de los talleres genoveses. En 1705 la ciudad levantó dos triunfos dedicados a san Servando y san Germán en la puerta del mar del muelle, que fueron encargados a Andrea Andreoli.

 

Durante el mes de noviembre los Santo Patronos  presiden el altar mayor

En este contexto, aprovechando que en 1687 Luisa Roldán y su marido Luis Antonio de los Arcos se encontraban en la ciudad, el Concejo les encargó las esculturas de los patrones que se encuentran en la catedral. Fueron entregadas a comienzos del mes de octubre de aquel mismo año, para la festividad de los santos. La policromía y el dorado estuvieron a cargo del cuñado de la Roldana, Tomás Antonio de los Arcos Navarro. Vinieron a sustituir a otras que se encontraban muy deterioradas. Los santos fueron pensados para estar instalados formando pareja compositiva, ya que cada uno mira a un lado, san Servando a su izquierda y san Germán a su derecha.

 

Altar mayor Santa Iglesia Catedral
 

Actualmente se encuentran en capillas diferentes dentro de una hornacina acristalada. (A exención del mes de noviembre que presiden el altar mayor)  La que ofrece mayor calidad artística y acierto compositivo es la escultura de san Servando. Fue concebida con el cuerpo apoyado en la pierna izquierda y con la derecha avanzada, lo que le confiere cierto movimiento. Pese a que mantiene la actitud estática de los santos militares tallados por Pedro Roldán, la Roldana le insufló un dinamismo diferente a través de las ondulaciones de la falda, los cabellos agitados con grandes mechones al vuelo y el giro de cabeza. La diferencia más destacada entre ambas esculturas está en sus cabezas. El cabello de san Germán, peinado con raya en el centro, cae lacio y sin el volumen y movimiento del de su hermano.

Ofrenda floral  

Desgraciadamente, su devoción fue decayendo con los años y ahora se reduce al culto interno en la Catedral y una ofrenda floral por parte del Ayuntamiento en su día, el 23 de Octubre, que pasaría desapercibido si no fuera por esas coronas de laurel en sus triunfos de Puerta Tierra.

 Fuente texto: Pedro Jaime Moreno de Soto, Historiador del Arte / Cuadernos de los amigos de Osuna.